Comentario:
Día de la madre en argentina, que mejor excusa para cocinar algo bien rico y goloso. Nada de pensar en calorías, me puse hacer este bizcocho de chocolate que básicamente se te derrite en la boca y se puede resumir en 8 pasos. Tuvo muy buenas críticas y espero que a ustedes les guste tanto como a mí y a mí familia.Tuve que realizarle dos cambios a la receta: el sirope dorado y la leche evaporada.
Para el sirope dorado como no tenía, encontré en internet que se puede reemplazar por miel. Le puse dos en vez de tres cucharadas ya nadie de la familia es fanático.
En el caso de la leche evaporada, en algunos supermercados se consigue, pero yo directamente decidí poner el doble de la cantidad que se necesita ( en realidad un poquito más por las dudas) y la puse al fuego esperando a que se reduzca hasta la mitad, y tome un color más amarillento. Hay que estar atentos e ir revolviendo para que no se forme nata. Cuando ya este reducida, antes de utilizarla hay que pasarla por un colador.
PD: Use moldes de 24cm porque no tenía de 20cm. La única diferencia va a ser el alto o el largo de la torta.
Receta:
Ingredientes:
- Bizcochuelo:
175 gr. de azúcar
3 huevos batidos
3 cucharadas de sirope dorado
50 gr de almendras molidas
175 gr. de harina leudante
1 pizca de sal
50 gr de cacao en polvo sin azúcar
- Glaseado:
50 gr de azúcar negra
225 gr de manteca en dados
5 cucharadas de leche evaporada
1/2 cucharadita de esencia de vainilla
1) Caliente en el horno a 180°C y enmanteque y enharine dos moldes llanos de 20 cm. de diámetro
2) Para elaborar el glaseado, coloque los ingredientes en un cazo de fondo grueso. Caliéntelos a fuego lento, sin dejar de remover, hasta que se haya fundido
3) Vierta el glaseado en un cuenco y deje que se enfríe. Tápelo y refrigérelo durante 1 hora o hasta que pueda untarlo.
4) Coloque la manteca y el azúcar en un cuenco, y bátalo hasta obtener una mezcla ligera. Agregue los huevos sin dejar de batir. Añade el sirope(miel) y las almendras.
5) En otro cuenco, tamice la harina, la sal y el cacao, y agréguelos a la mezcla. Vierta un poco de agua hasta obtener una consistencia casi líquida. Ojo no tiene que quedar líquida, sigue teniendo que estar cremosa pero más "suave" y menos densa.
6) Con una cuchara, pase la mezcla a los moldes que ha preparado y cuézalo en el horno entre 30/35 minutos, hasta que resulte esponjosa al tacto y al pinchar en el centro con un cuchillo salga limpio.
7) Deje enfriar la masa en los moldes durante cinco minutos y, a continuación, vuélquela sobre una rejilla metálica para que se enfríe completamente.
8) Una vez fríos, disponga la mitad del glaseado sobre uno de ellos y tápelo con el otro. Unte la parte superior y los laterales con el resto del glaseado.
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